Este año se cumplen cien años del asesinato a uno de los más
grandes héroes revolucionarios de México. Por tal motivo el Gobierno Federal
tuvo a bien decidir que este 2019 sea el año de El Caudillo del Sur, Emiliano
Zapata. Por lo tanto deberá inscribirse en toda la documentación oficial de la
federación la leyenda:
2019 AÑO DE EMILIANO ZAPATA.
"La tierra es de quien la trabaja".
Pero, ¿será esta la verdadera fecha de la muerte de El Caudillo
del Sur? O será sólo la fecha que maneja la historia oficial?
¿De verdad murió el general
el 10 de abril de 1919, en
Chinameca?
Desde que el cadáver de Miliano fue expuesto
en Cuautla, Morelos, existe el
rumor que dice que ese cuerpo no era de el padre, el amigo, el líder, el héroe
de la Revolución Mexicana.
Al llegar el cuerpo sin vida de Emiliano Zapata a Cuautla,
fue llevado al edificio de la presidencia municipal. Para identificar el
cadáver, el General Pablo González hizo traer a Eusebio Jáuregui quien había sido jefe del Estado Mayor de Zapata y
que declaró ante el notario Ruiz Sandoval reconocer el cuerpo de quien en vida
llevaba el nombre de Emiliano Zapata Salazar. Inmediatamente después le
inyectaron sustancias químicas al cuerpo para evitar su descomposición y poder
así exhibirlo al público colocándolo en una caja en la inspección de policía.
Como podrán imaginar fueron muchas las personas de todas partes
del estado de Morelos, de la Ciudad de
México y de sus alrededores las que
acudieron a ver el cadáver de Emiliano Zapata, fueron casi 24 horas estuvo
expuesto a las miradas de cientos de personas.
Es aquí, en ese lugar y en ese momento cuando los amigos y
conocidos del libertador del sur,
inician el rumor de que no es su querido Miliano el que está tendido en esa caja.
Uno por uno, pasaban junto al cuerpo buscando algún indicio
que les dijera que su gran amigo, su protector no estaba muerto, ¡y lo
encontraron! Emiliano Zapata tenía una verruga en forma de manita en su pecho
con el que había nacido; también tenía la cicatriz de una cornada de y le
faltaba un dedo y por más que buscaban
en el pecho del cuerpo expuesto no encontraban la verruga, ni la cicatriz y las
manos tenían todos los dedos completos. ¡El corazón les dio un brinco! ¡Zapata estaba
vivo!
No faltó quien levantara la voz diciendo que ese hombre no
era Zapata. Un gran error, ya que dicen
algunos testigos, los sacaban de la fila que era para despedirse, los llevaban
a la parte trasera del edificio y los
"silenciaban" para evitar que propagaran la noticia de que Zapata
estaba vivo y se volviera a levantar en armas su gente.
Foto: el perfil del muerto presentado y la recreación de como debería lucir el cadáver de Zapata.
¿De quién era el cuerpo tendido en Cuautla, Morelos?
Fotos Zapata vestido de manta
Fue él, su compadre, quien fue hasta la Hacienda de San Juan
Chinameca mientras Emiliano esperaba
escondido dentro de un pozo donde el agua le llegó hasta la nariz, esperando
el desenlace de la dichosa cita. Cuando anocheció y al no tener noticias de su
compadre, el caudillo salió del pozo y dirigió sus pasos a casa de otro de sus
compadres: Moisés Salomón.
Moisés Salomón era de origen palestino, llegó a México en el
año de 1906 escapando de los horrores del dominio turco. Al llegar a México recibió la protección de
don Pedro Slín, quien en la calle de Corregidora le daba una caja con listones
y mercancía para vender en las calles de la Ciudad de México.
Posteriormente, Moisés Salomón llegó a Cuernavaca vendiendo
ropa y manta en los pueblos del sur de Morelos y norte de Guerrero en burro o a
caballo. Tiempo después estableció su tienda en el pueblo de Xoxocotla, donde
tuvo mucho éxito, pero al estallar la revolución se vio obligado a quitarla y
trasladar el negocio a una población más segura como era Jojutla. En esa
población conoció a Emiliano Zapata, cliente de su tienda y trabó amistad con
él, tanto que siempre que visitaba ese pueblo comía en la casa de don Moisés
Salomón. Los esposos Salomón le bautizaron a Emiliano Zapata a su hijo Nicolás
y éste, a su vez, les llevó a bautizar a su hijo Jorge Salomón.
Fuel Moisés Salomón quien junto con Zapata llegaron hasta el
puerto de Acapulco para salir de ahí
rumbo a Arabia donde vivió con
tranquilidad, durante muchos años más Emiliano Zapata.
A pesar de la lejanía y el autoexilio que se impuso Zapata,
nunca perdió contacto con su familia y amigos.
Se dice que su hijo recibía cartas de otro país y en una de
ellas su padre, Emiliano, le reclamó diciéndole que:
"Dejara de hacer pendejadas, que ya sabía que había
sido diputado y presidente municipal y que vivía del gobierno".
En los años sesentas, un día, en Cuautla se izó la bandera a media asta sin que hubiera
motivo pues no era una fecha marcada por el calendario cívico. Nadie supo el
motivo pero se especuló que Zapata había fallecido en Arabia.
Nicolás Zapata, hijo menor de Emiliano comenta los esfuerzos
que se han hecho para traer sus restos y
que alguna vez la Presidencia de la República autorizó en secreto el
cumplimiento de la última voluntad de Zapata lamentablemente dieron la
contraorden casi de inmediato.
Seguramente se preguntarán cual es el nombre del famoso
compadre que ofrenda su vida por la de Zapata.
Son varios los nombres que se mencionan.
Nicolás Zapata afirma que el compadre se llamaba: Agustín
Cortés, que era también miembro de su tropa y mano derecha.
Berenice Granados en su libro "Emiliano Zapata: vida y
virtudes” recoge el testimonio de varios
vecinos que convivieron con el
General quienes afirman que el compadre
se llamaba Jesús Salgado, miembro del ejército Zapatista.
Y si estos rumores fueran ciertos, ¿por qué se fue del país
Zapata,dejando a sus hijos, a su familia y a estas tierras por las que tanto
peleó?
Esa respuesta nunca la sabremos.
Pero aún en caso de que estos rumores fueran ciertos, la
admiración que siento por El Caudillo del Sur no disminuirá.
¡Viva mi General Zapata!
Este es un tema importantísimo que los historiadores profesionales han evadido tratar; al recoger opiniones de ellos, la mayoría se limita a decir: "es una leyenda, es un mito que el pueblo inventó".- 5 años me llevó la investigación de gabinete y de campo para editar, con mis propios recursos mi libro ZAPATA-VICTORINO, ¿quién traicionó a quién? En su 2a. parte abordo el tema de la NO muerte de Emiliano. Sustentos: 1.El lunar "en forma de manita que Zapata tenía en el pecho, el cadáver NO lo tenía 2.A Emiliano le faltaba un pedazo del dedo meñique de su mano izquierda y el muerto tenía los dedos completos 3. El lunar, en forma de verruga el cadáver exhibido en Cuautla No lo tenía. 4. Zapata NO fue un tonto para dejarse engañar como niño por Guajardo, a quien conoció PERSONALMENTE el 9 de abril de 1919, es decir, un dia antes de la emboscada en Chinameca.- Lamento que el propio INEHRM, al cual doné 7 ejemplares de mi obra, haya hecho caso omiso de ese tema. DESDE MEDIADOS DE DICIEMBRE SOLICITÉ AUDIENCIA CON EL DIRECTOR Y SIGO ESPERANDO "la llamada prometida".
ResponderBorrarHola. Gracias por tu comentario el cual nos parece muy interesante por la investigación hecha por ti y con recursos propios. Es una pena y da rabia el saber que nuestras autoridades desempeñan mediocremente sus funciones.Te deseamos éxito en tu empresa y por favor comparte con nosotros el resultado de tu entrevista que esperamos te la conceda el director del INEHRM.
BorrarSaludos.
Dónde se consiguen sus ejemplares? Sería interesantísimo leerlos y profundizar más en la historia tan enigmática de nuestro general Zapata!
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