Alguna vez leí a una persona muy molesta quejándose de la manera tan "cruel"
que expulsaron a los Españoles de la Nueva España después de consumada la independencia.
Ese comentario me sorprendió y me llenó de curiosidad. ¿No es natural que una de las prioridades para cualquier país que se ha independizado es sacar de su territorio a aquellos que fueron sus conquistadores u opresores?
Veamos, antes de consumar la independencia en la Nueva España existía una desigualdad social jerarquizada de la siguiente manera:
• Españoles de nacimiento que tenían las posiciones más importantes en la administración pública.
• Criollos: Hijos de españoles que nacieron en México. No podían tener cargos en la administración pública a pesar de que algunos eran dueños de haciendas o grandes comerciantes.
• Indígenas, mestizos y otras castas. En total estos eran el 82 % de población siendo los indígenas los más explotados.
Este fue uno de los principales motivos para que los criollos se levantarán en armas, uniéndose con los indígenas y otras castas para iniciar la revuelta en contra de los españoles.
Si bien fueron varios los españoles los que salieron huyendo de la nueva España debido al propio conflicto, muchos otros se quedaron esperando que el movimiento independiente se extinguiera en cualquier momento.
Al declararse la independencia, los españoles que quisieran marcharse libremente incluso con sus caudales lo pudieron hacer gracias a los Tratados de Córdoba celebrados el 24 de agosto de 1821 que en su artículo 15 dice:
<< Toda persona que pertenece a una sociedad, alterado el sistema de gobierno, o
pasando el país a poder de otro príncipe, queda en el estado de libertad natural para trasladarse
con su fortuna adonde le convenga, sin que haya derecho para privarle de esta libertad, a menos
que tenga contraída alguna deuda con la sociedad a la que pertenecía, por delito o de otro de los modos que conocen los publicistas. En este caso están los europeos avecindados en Nueva España y los americanos residentes en la Península; por consiguiente, serán árbitros a
permanecer, adoptando esta o aquella patria, o a pedir su pasaporte, que no podrá negárseles,
para salir del reino en el tiempo que se prefije, llevando o trayendo consigo sus familias y bienes;
pero satisfaciendo a la salida, por los últimos, los derechos de exportación establecidos o que se
establecieren por quien pueda hacerlo.>>
Una vez mas algunos españoles se negaron a salir del país esperando que la corona de España desconociera los Tratados de Córdoba y retomara el poder en la Nueva España, cosa que no sucedió como sabemos.
El 10 de mayo de 1827 se promulgó la ley de empleo por la que ningún español de nacimiento podría ocupar cargo alguno en la administración pública, civil o militar. En agosto se propuso la primera ley de expulsión de todos los españoles sin excepción, con un plazo de 30 días y la condición de poder sacar del país únicamente la tercera parte de sus bienes. Jalisco fue el primer estado en ponerlo en práctica dando un plazo de 20 días para salir del país, además se les prohibía el derecho a reunión. Otros estados tomaron medidas similares. Así que el 20 de diciembre de 1827 se aprobó la primera ley de expulsión de los españoles con 42 votos a favor y 13 en contra a nivel nacional.
En conclusión los Españoles pudieron abandonar el país con la mayoría de sus pertenencias desde el inicio de la revuelta y durante la revuelta, con la mayoría de sus pertenencias y en completa libertad. Los que se arriesgaron a quedarse en el país fueron expulsados por las leyes con algunos beneficios. Aunque como suele suceder en estos casos de expulsiones masivas, los que se llevaron la peor parte fueron los ciudadanos con pocos recursos que lo perdieron todo; como en España el caso de los Judíos en 1492, cuando los Reyes Católicos decretaron la expulsión de los judíos mediante un decreto donde se les da un plazo suficiente para escoger entre el bautismo o el exilio; quien escogiera irse podía llevarse consigo sus bienes muebles e inmuebles pero ojo, la ley no permitía sacar oro ni plata o caballos.
Claro, cabe mencionar que estos hechos son producto de una época. Una vez aceptada la independencia de México por la corona española y hasta nuestros días todos los extranjeros han sido recibidos con los brazos abiertos en esta tierra sagrada.
que expulsaron a los Españoles de la Nueva España después de consumada la independencia.
Ese comentario me sorprendió y me llenó de curiosidad. ¿No es natural que una de las prioridades para cualquier país que se ha independizado es sacar de su territorio a aquellos que fueron sus conquistadores u opresores?
Veamos, antes de consumar la independencia en la Nueva España existía una desigualdad social jerarquizada de la siguiente manera:
• Españoles de nacimiento que tenían las posiciones más importantes en la administración pública.
• Criollos: Hijos de españoles que nacieron en México. No podían tener cargos en la administración pública a pesar de que algunos eran dueños de haciendas o grandes comerciantes.
• Indígenas, mestizos y otras castas. En total estos eran el 82 % de población siendo los indígenas los más explotados.
Este fue uno de los principales motivos para que los criollos se levantarán en armas, uniéndose con los indígenas y otras castas para iniciar la revuelta en contra de los españoles.
Si bien fueron varios los españoles los que salieron huyendo de la nueva España debido al propio conflicto, muchos otros se quedaron esperando que el movimiento independiente se extinguiera en cualquier momento.
Al declararse la independencia, los españoles que quisieran marcharse libremente incluso con sus caudales lo pudieron hacer gracias a los Tratados de Córdoba celebrados el 24 de agosto de 1821 que en su artículo 15 dice:
<< Toda persona que pertenece a una sociedad, alterado el sistema de gobierno, o
pasando el país a poder de otro príncipe, queda en el estado de libertad natural para trasladarse
con su fortuna adonde le convenga, sin que haya derecho para privarle de esta libertad, a menos
que tenga contraída alguna deuda con la sociedad a la que pertenecía, por delito o de otro de los modos que conocen los publicistas. En este caso están los europeos avecindados en Nueva España y los americanos residentes en la Península; por consiguiente, serán árbitros a
permanecer, adoptando esta o aquella patria, o a pedir su pasaporte, que no podrá negárseles,
para salir del reino en el tiempo que se prefije, llevando o trayendo consigo sus familias y bienes;
pero satisfaciendo a la salida, por los últimos, los derechos de exportación establecidos o que se
establecieren por quien pueda hacerlo.>>
Una vez mas algunos españoles se negaron a salir del país esperando que la corona de España desconociera los Tratados de Córdoba y retomara el poder en la Nueva España, cosa que no sucedió como sabemos.
El 10 de mayo de 1827 se promulgó la ley de empleo por la que ningún español de nacimiento podría ocupar cargo alguno en la administración pública, civil o militar. En agosto se propuso la primera ley de expulsión de todos los españoles sin excepción, con un plazo de 30 días y la condición de poder sacar del país únicamente la tercera parte de sus bienes. Jalisco fue el primer estado en ponerlo en práctica dando un plazo de 20 días para salir del país, además se les prohibía el derecho a reunión. Otros estados tomaron medidas similares. Así que el 20 de diciembre de 1827 se aprobó la primera ley de expulsión de los españoles con 42 votos a favor y 13 en contra a nivel nacional.
En conclusión los Españoles pudieron abandonar el país con la mayoría de sus pertenencias desde el inicio de la revuelta y durante la revuelta, con la mayoría de sus pertenencias y en completa libertad. Los que se arriesgaron a quedarse en el país fueron expulsados por las leyes con algunos beneficios. Aunque como suele suceder en estos casos de expulsiones masivas, los que se llevaron la peor parte fueron los ciudadanos con pocos recursos que lo perdieron todo; como en España el caso de los Judíos en 1492, cuando los Reyes Católicos decretaron la expulsión de los judíos mediante un decreto donde se les da un plazo suficiente para escoger entre el bautismo o el exilio; quien escogiera irse podía llevarse consigo sus bienes muebles e inmuebles pero ojo, la ley no permitía sacar oro ni plata o caballos.
Claro, cabe mencionar que estos hechos son producto de una época. Una vez aceptada la independencia de México por la corona española y hasta nuestros días todos los extranjeros han sido recibidos con los brazos abiertos en esta tierra sagrada.
y todavia estan chupando la sangre de los mexicanos
ResponderBorrarDe que manera?
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